Fachadas de chapeado de granito

Hay un uso habitual de hidrofugantes para impermeabilizar fachadas de chapeado de granito. Los hidrofugantes que se utilizan son mayoritariamente siliconas, formuladas como mezclas de silanos y siloxanos. En una fachada de chapeado el hidrofugante tiene que ser estable en el ph alcalino del mortero de las juntas y del mortero de pegado de la piedra, también tiene que tener una buena penetración y resistencia hidrofoba a las precipitaciones con vientos fuertes, una gran resistencia a la radiación solar, etc. Además de las precipitaciones asociadas a una climatología adversa, hay que considerar la condensación y la absorción higroscópica del granito y del mortero.

El hidrofugante que tiene buen comportamiento en el granito, no resiste la acción química del mortero. Por el contrario, el hidrofugante que tiene un buen comportamiento en el mortero no es válido en el chapeado de granito. Hay varias explicaciones para ello, pero esta explicación exige un conocimiento de química y que está relacionado con la hibridación de tipo sp3, que adopta el átomo de silicio en los silanos, generando compuestos inestables. Sin embargo, esta hibridación sp3 en el cuarzo (SiO2) esta ordenada espacialmente en una red tridimensional (cristalizado). Esta sílice amorfa, es también un desecante, es decir que quita la humedad del lugar en que se encuentra.

Hace más de 15 años que empezamos a desarrollar técnicas alternativas al uso de silanos y siloxanos basándonos en el precipitado de sílice amorfa en la red capilar, primero a nivel experimental y desde hace 8 años empezamos a utilizarlos en la impermeabilización y consolidado del granito. Los procesos de consolidado químico que formulamos para el sellado de la red capilar, nos han permitido vencer las dificultades que los hidrofugantes de silicona convencionales, no pueden resolver.

Las siguientes fotografías son de fachadas en chapeados de granito hidrofugados y las juntas han sido tomadas con masilla de poliuretano. En todas se aprecia la degradación del hidrofugante en el chapeado de granito y la masilla de las juntas no impiden la filtración a través del chapeado de granito. La inestabilidad de las siliconas suelen ocasionar además, en el granito, manchas estructurales y superficiales pues se acelera la oxidación y degradación del feldespato asociado a la degradación del propio hidrofugante.

muestra de fachada deteriorada por hidrofugante y masilla en las juntas

El hidrofugado tiene una resistencia hidrofobia de unos pocos años y, como la ignorancia es atrevida, muchos aplicadores, con un desconocimiento total de los productos químicos que utilizan, tienen la osadía de garantizar sus trabajos por 10 años o más, cuando hidrofugan una fachada. Yo nunca entendí a que se refieren con esa garantía pues los propios fabricantes de los hidrofugantes no asumen esa responsabilidad.

También he visto fachadas en chapeado de granito impermeabilizadas con resinas de silicona, barnices, pinturas, etc.

Yo soy de la opinión de que no existen productos milagrosos que resuelven las filtraciones que presentan estas fachadas y que están directamente relacionados con la capilaridad, el tipo de granito y con los defectos constructivos del edificio. Sellar las juntas con masillas, hidrofugar la fachada, etc. Pueden ser tratamientos efectivos durante algún tiempo, pero a los pocos años, las humedades vuelven a manifestarse como antes de hacer el tratamiento.

Los productos químicos que se utilizan para corregir estos problemas no pueden ser manejados por personas sin conocimientos suficientes de química, pues su manejo y aplicación pueden llegar a ser realmente peligrosos. Todos los aplicadores de productos químicos en construcción, deberían de tener una formación en el manejo, en la utilidad y en la duración de los tratamientos. No consigo imaginar una limpieza química del granito por personal sin formación, con eliminación de manchas, hidrofugantes, pinturas, etc. La limpieza que se utiliza habitualmente, suele ser mecánica mediante: el abujardado, fresado, chorreado, etc. Otros mas atrevidos utilizan: lejía, sosa, agua fuerte, etc. En ningún caso el resultado es minimamente satisfactorio, pero siguen haciéndolo.